Nº 205DICIEMBRE - 2010

Brutal agresión de la policía y militares a los activistas defensores de los DD.HH

23 de agosto de 2010

A las dos de la madrugada del día 22 a 23 de agosto de 2010, ANTONIO VELÁZQUEZ (turista de nacionalidad mexicana), ISABEL TERRAZO (turista de nacionalidad española) y otras dos turistas, también de nacionalidad española, más concretamente de Aragón, estaban esperando el regreso desde Argel de los cinco activistas defensores de DD.HH entre los que se encontraban SULTANA JAYA, BRAHIM SABBAR, ANASSIRI y MHAMED HAMMAD.

La gente estaba festejando pacíficamente en el Barrio de Maatala el regreso de los cinco activistas saharauis que habían estado participando en la Universidad de Verano de Boumerdas (Argelia). Toda la zona se encontraba rodeada de militares y de policías vestidos de civil. Todos ellos portaban porras en las manos, listos para actuar. Allanaron varias casas de saharauis y se fueron directamente a por BRAHIM SABBAR, ANASSIRI, SULTANA JAYA y HMAD HAMMAD a quienes tiraron al suelo golpeándolos brutalmente tanto con las porras como con los puños.

También hicieron lo mismo con todos los turistas que estaban allí, sabiendo que eran turistas puesto que les pidieron la documentación ANTES y DESPUÉS de la agresión. Con ANTONIO VELÁZQUEZ se ensañaron más que con las mujeres, la agresión física a ellas consistió en recibir algún golpe pero no ha sido tan grave.

Según un primer relato de ANTONIO VELÁZQUEZ, han intentado sacarlos de la casa de HMAD a la fuerza, pero ellos se han negado, con lo que en estos momentos están bajo “arresto domiciliario”, pues además están rodeados por muchos policías de paisano, personajes siniestros conocidos por su virulencia y agresividad en sus atentados.

ANTONIO VELÁZQUEZ ha declarado, completamente indignado y preocupado por la situación, “que en los territorios ocupados del Sahara Occidental lo que se está viviendo es una ‘guerra de baja intensidad’ y que la Comunidad Internacional, incluida la MINURSO (Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del S.O.) que está allí mismo, no hacen nada, que son simples turistas los que tienen que venir a dar fe de esta situación y después informar al resto del mundo.

Que estas agresiones se suceden constantemente contra toda la población saharaui por el hecho de ser saharaui sin importarles ni el sexo ni la edad de la persona que agreden, sean niños o ancianos. Que en este momento tanto él como sus compañeras temen por su integridad física más que en ningún otro momento de este viaje, temen salir de la casa y temen salir de la ciudad, por lo que les pueda suceder. Que hacen un llamamiento a todas las organizaciones internacionales para que tengan los ojos puestos en esta situación y hagan un seguimiento de ella y que se ponga en conocimiento de las autoridades españolas y las autoridades mexicanas solicitando su protección”.

Cabe destacar que desde ese momento, los heroicos y valientes miembros de la Intifada, después de ver la brutal intervención, han alzado una bandera saharaui en la Avda. Smara, principal arteria de la ciudad de El Aaiún ocupado.

La lista provisional de heridos es la siguiente: BRAHIM SABBAR (heridas en la espalda), SULTANA JAYA (heridas en la cabeza), ANTONIO VELÁZQUEZ (tres porrazos en el hombro, tres en el resto del cuerpo y uno en la cabeza, tiene la mitad de la cara desfigurada, heridas en la nariz), ANASSIRI (hematomas por todo el cuerpo), MADRE DEL ACTIVISTA HMAD HAMMAD (ingresada en el Hospital Bel Mehdi a causa de la presión).

El OBSERVATORIO DE DERECHOS HUMANOS PARA LOS TERRITORIOS OCUPADOS DEL SÁHARA OCCIDENTAL hace un llamamiento urgente haciendo suya la petición de los activistas de Derechos Humanos de los compañeros y compañeras que están realizando un viaje para conocer el Sáhara Occidental, para que se difunda esta información y se vuelque la mirada hacia este territorio ocupado por Marruecos donde sistemáticamente se violan los más elementales derechos humanos de sus habitantes y sus visitantes.

L@s observador@s internacionales son:

· Ema Pamar Lax.

· Pilar Almudena Foctuno Aguiran.

·  Isabel Terraza Rebollo.

· Antonio Velázquez

Un niño saharaui de trece años muere a manos de un colono marroquí en Tan-Tan

11 de septiembre de 2010

Desde el Observatorio de DDHH para los Teritorios Ocupados del Sahara Occidental denuncian que "una vez más un colono movido por el odio fomentado por las altas esferas del Majzen asesina cruelmente a un saharaui,con toda impunidad"

Esta vez la víctima, desgraciadamente es un inocente niño que acababa de cumplir los trece años, su única culpa ha sido el haber nacido Saharaui.

Se trata de Salek ould Mohamed Omar de trece años que murió como consecuencia de la brutal paliza por parte de un colono marroquí en la ciudad de Tantan.

La trágica agresión se produjo el pasado día 19 de agosto cuando el niño jugaba en la compañía de  varios amigos que también sufrieron la agresión de este colono.

Salek Ould Mohamed Omar fue llevado con urgencia al hospital después de sufrir un coma profundo, pero la complicación de las heridas sufridas no se pudo evitar Familias saharauis del lugar organizaron una manifestación en silencio para mostrar las condolencias a la familia de la víctima y exigir el enjuiciamiento del agresor o agresores.

Desde el Observatorio de DDHH para los Territorios Ocupados del Sahara Occidental muestran su repulsa por estos actos criminales que cada día se suceden al mismo tiempo hacemos llegar nuestro dolor a la familia de Mohamed Omar en estos momentos difíciles.

Asimismo solicitan que haya un mecanismo Internacional para la protección de la población saharaui en los territorios ocupados del Sahara Occidental

La Policía marroquí golpea y deja parapléjica

a una joven saharaui

15 de septiembre de 2010

· La agredida trataba de proteger a una embarazada.

· Los agentes irrumpieron en su casa y apalearon a su familia.

· Un tratamiento en España podría devolverle la movilidad.

 

Es otra historia cruel y habitual localizada en el norte del Sáhara Occidental. Los habitantes de El Aaiún malviven hacinados entre incómodos silencios en el trastero del mundo. Pero alguna vez se sobreponen al pánico y rompen sus faringes para gritar consignas de libertad. Y la libertad es proporcional a los minutos que invierte la Policía marroquí en aparcar sus lecheras en el desierto, ajustar los cascos antidisturbios y golpear aire, brazos, dignidad y cerebros.

La rabia derrotó a la mesura el pasado 30 de agosto. Un grupo de jóvenes se concentraron en cualquier calle y aullaron contra la ocupación. La Policía marroquí corrió y empezó la caza. La dispersión despejó la calle en menos de un minuto. Pero los agentes localizaron presas en casas colindantes y comenzó la segunda fase de la represión: acceder a propiedades privadas y golpear indiscriminadamente a ciudadanos saharauis.

Agresiones físicas.

La familia Foucraui auxilió a un grupo de jóvenes que burlaban las porras de la Policía. Hasta que la Policía burló la puerta de su domicilio. Y comenzó la recreación alauí de La naranja mecánica. Los golpes cortaron el aire, hasta que uno cortó la espalda de la joven Foucraui. Literal. Intentaba proteger a una mujer embarazada de la agresión policial cuando un mal golpe la dejó inmóvil e insensible de cintura para abajo. La familia la trasladó a un hospital de El Aaiún, pero ante la precariedad de los recursos humanos del centro médico, varias familias recaudaron 600 euros para trasladarla a la ciudad de Agadir.

Ahora descansa en una habitación y espera los resultados de unas pruebas que determinarán si la lesión es reversible o definitiva. Aunque los primeros análisis sugieren que un traslado a España sería clave para recuperar la movilidad. Algunas ONG que trabajan sobre el terreno gestionan su viaje, pero los costes del traslado han imposibilitado, por el momento, esta opción.

La familia ha denunciado la agresión ante la Policía, pero la Policía es marroquí. "Es inútil luchar contra las instituciones. Es acusar al propio sistema de los abusos que comete", explica el observador civil Pablo Álvarez desde El Aaiún. Antes de colgar informa de que enviará la historia y las fotografías de dos mujeres saharauis atropelladas intencionadamente por un Policía. Recientemente envió el testimonio de un joven al que amenazaron con violar a orillas de un río. Llueve sobre mojado.

Jueves, 11 de Noviembre de 2010

"Marruecos está alimentando una guerra civil"

La huelga de hambre de Aminatu Haidar en el aeropuerto de Lanzarote recordó al mundo la brutal represión que sufren los saharauis en el territorio ocupado ante el silencio de la comunidad internacional, una vergonzosa realidad que ha quedado al descubierto de nuevo estos días

PAMPLONA. La activista saharaui Aminatu Haidar denunció ayer en los micrófonos de ONDA VASCA que la actuación de los colonos marroquíes tras el brutal desmantelamiento del campamento de protesta de Gdaim Izik, incendiando casas saharauis y atemorizando a la población de El Aaiún, es producto del interés de Marruecos en una guerra civil entre marroquíes y saharauis. De hecho, existen precedentes como la agresión sufrida por un grupo de activistas que, a su regreso de Tinduf, fue agredido en el aeropuerto de El Aaiún ante la mirada impasible de la Policía marroquí.

¿Qué noticias tiene de lo que está pasando ahora mismo en el Sáhara Occidental?

Aún no tenemos cifras concretas, pero sí sabemos que hay decenas de muertos y centenas de heridos. También hay más de cien detenidos, sesenta desaparecidos. Anoche (por la noche del martes 9 de noviembre), las detenciones continuaron hasta la madrugada y han detenido a los menores. Ahora mismo, en la ciudad de El Aaiún, no hay ningún joven, todos los jóvenes están encarcelados.

Llama la atención el protagonismo que han adquirido los colonos marroquíes tras los sucesos ocurridos el lunes, parece que se han convertido en la fuerza de choque del Ejército marroquí.

Esto es lo más grave en la ecuación de esta masacre. Nosotros, como activistas de derechos humanos, hemos pedido desde hace casi un año muchas veces la ayuda de las Naciones Unidas para evitar una masacre, para evitar una guerra civil, porque hemos notado que Marruecos está alimentando una guerra civil entre los saharauis y los marroquíes. El primer hecho lo notamos en el aeropuerto de El Aaiún, cuando un grupo de activistas que estaba de visita en los campamentos de los refugiados saharauis en Tinduf (Argelia) fue agredido por los colonos marroquíes a su regreso en el aeropuerto de El Aaiún y la Policía estaba con ellos. Lo que está pasando en estos momentos es horrible, son los colonos los que han destruido las casas, las tiendas de los saharauis. Los niños no pueden ir a las escuelas y la gente no puede salir de sus casas. Hay un terror increíble y, además, hay un estado de no sé como se dice en español, es decir nadie no puede circular después de las ocho y los que mandan ahora son los militares.

Un toque de queda o un estado de asedio.

Sí.

Usted ha tenido un gran reconocimiento internacional por su labor en favor de los derechos humanos. ¿Se siente por eso especialmente decepcionada por la respuesta internacional cuando de verdad toca hacer las cosas? Es decir, no dar homenajes, sino ponerse manos a la obra.

Sí, claro que estoy decepcionada con el silencio de la comunidad internacional y, sobre todo, de algunas potencias del Consejo de Seguridad. Lo he dicho varias veces, nosotros, los activistas, no podemos orientar a los jóvenes a optar por la resistencia pacífica y no violenta si no hay unos hechos concretos de parte de la comunidad internacional como, por ejemplo, la protección y la observación de derechos humanos a través de algún tipo de mecanismo de la ONU en el Sáhara. Hasta el momento no lo hay. Si hubiera un mecanismo de observación, todo el mundo sabría las cifras de víctimas y Marruecos no podría hacer esta masacre. Marruecos ha hecho la masacre en la ausencia de testimonios internacionales.

¿Cómo cree que va a terminar esta revuelta y qué consecuencias puede tener?

Si la comunidad internacional estaba esperando una masacre para hacer algo a favor de la causa saharaui, éste es el momento. Hay que solucionar el problema, los saharauis nunca van a ser marroquíes, pase lo que pase, ni la represión, ni las detenciones van a obligar a los saharauis a ser marroquíes. Esto hay que saberlo, si quieren eliminar todo un pueblo, eso es otra cosa. Ahora hay una masacre y vamos a ver qué pasa. Ya no tenemos ninguna confianza en la ONU ni tampoco en las negociaciones entre el Frente Polisario y Marruecos.