estamos en crisis, y probablemente sea cierto, sobre todo para quienes no tienen trabajo, pero sabrías decir ¿por qué estamos en crisis?
¦ Si haces esta actividad con un grupo, realizar una avalancha de ideas sobre los indicadores que nos confirman que efectivamente estamos en crisis.
¦ Hace dos años, aproximadamente, la economía iba perfectamente, hacer otra avalancha de ideas sobre los indicadores que nos confirman que efectivamente hace dos años la economía iba bien. ¦ Hacer un cuadro resumen, con dos columnas, que se encabezarán así: Ü UNA ECONOMÍA IRÁ BIEN SI... Ü UNA ECONOMÍA IRÁ MAL SI...
¦ ¿Qué dicen los políticos acerca de lo necesario para salir de la crisis? Busca en la red, declaraciones de políticos y personas destacadas. ¦ ¿Coincide con lo expresado en la primera columna? ¦ ¿Alguna de las medidas para salir de la crisis tiene algo que ver con el consumo? ¦ Para salir de la crisis será necesario, ¿aumentar o disminuir el consumo? ¿Por qué? ¦ ¿VERDADERO O FALSO?, Si aumenta el consumo, hay más trabajo, si hay más trabajo, tenemos más ingresos, si tenemos más ingresos, podemos tener todo lo que queramos, si tenemos todo lo que deseamos, vivimos mejor. ¦ ¿VERDADERO O FALSO? Cuánto más dinero gane más calidad de vida tendré. ¦ Hacer una avalancha de ideas sobre: NECESIDADES BÁSICAS. ¦ Hacer otras avalancha de ideas sobre: NECESIDADES COMPLEMENTARIAS. ¦ Hacer una tercera avalancha de ideas sobre: NECESIDADES SUPERFLUAS. ¦ Hacer una tabla con tres columnas donde se coloquen los tres puntos anteriores. ¦ Vamos a cuantificar cada una de las necesidades para poder vivir durante un mes. ¦ Por último, os planteamos la necesidad de reducir el consumo a la mitad, de qué necesidades podríamos prescindir. Intentar poneros de acuerdo en el grupo. ¦ Ahora pasamos a leer los tres artículos siguientes. |
El sistema obliga a trabajar en proyectos en los que no se cree para poder comprar cosas que no se necesitan. El capitalismo favorece el crecimiento, pero no es eficiente en el fomento del bienestar y la felicidad social |
El País, 8 de octubre de 2009 |